Empezar la escuela infantil (guardería) es un gran reto tanto para los peques como para los padres. La mayoría de bebés o niños/niñas no se ha separado de sus padres hasta el momento de empezar el cole. Por eso, suelen ser momento traumáticos para muchos padres y/o niños.
En esta entrada vamos a hablaros sobre la adaptación a la escuela infantil (guardería) de nuestro peque. Es importante tener en cuenta que el nuestro tenía aproximadamente 17 meses cuando empezó y lo hizo en clase de 1 año. Él ya andaba y se valía por sí solo para comer, beber y pedir lo que necesitaba (a su manera). Esto es importante porque la adaptación dependerá mucho del nivel del desarrollo que tenga el niño.
Nuestra experiencia los primeros días de guardería
El primer día tanto el papi como yo fuimos sin expectativa ninguna. Pensábamos que iba a ponerse a llorar como loco o que la iba a empezar a liar de alguna manera (tiene mucho temperamento). Pero no, se sentó en una alfombra y empezó a jugar con unos animales que había en la clase. Nos sorprendió mucho. Él se quedó muy tranquilo así que después de unos cuantos minutos decidimos marcharnos. El papi y yo estábamos muy contentos y sorprendidos porque nada tenía que ver con las expectativas que teníamos del momento.
Sin embargo… la historia cambió al día siguiente. El niño ya sabía donde iba y también sabía que papi y mami se iban a ir al cabo de un rato y eso no le parecía buena idea. Por lo que, se aferró a nosotros y no quería que nos fuéramos. Ese día nos quedamos un buen rato con él y al final nos terminamos saliendo (no dejan más de 20 minutos a los padres en el cole de nuestro peque). Él se quedó llorando. Esto pasó durante prácticamente toda la primera semana.
Después de la primera semana la cosa cambió. No se quedaba contento y hacía «pucheritos» cuando nos teníamos que ir, pero empezó a dejar de llorar. Al mes y medio empezó a entrar él solo en la clase andando. Le costaba despedirse, pero ni de lejos lloraba lo mismo que los primeros días.
Consejos para la adaptación durante los primeros días de escuela infantil
Si algo tenemos claro es que la adaptación a la escuela infantil es un proceso que requiere mucha paciencia y compresión por parte de niños, padres y profesores. Aunque, como os decíamos antes, cada niño es un mundo y depende mucho del nivel de desarrollo de cada uno, hay una serie de pautas que nos pueden ayudar a pasar mejor este periodo de transición:
- Despedidas breves y seguras. Es totalmente normal que los niños sientan ansiedad al separarse de sus padres. Por lo que, si prolongamos las despedidas podemos hacer (involuntariamente) que esta ansiedad aumente. Es importante, por lo tanto, despedirse de forma breve y segura. Podríamos decirles algo como «ahora me voy a ir, pero dentro de un rato vengo a buscarte».
- Rutinas. Establecer una rutina matutina cada día antes de ir al cole es de vital importancia para que el niño pueda saber qué esperar y que de esta manera se sienta mucho más seguro. Esto ayudará a reducir el estrés.
- Háblale. Aunque creamos que no nos entienden, la compresión del lenguaje va mucho antes que la expresión. Con esto quiero decir que, aunque no hable, quizás sin entienda. Por lo que, puedes ir explicándole todo lo que va a ocurrir desde que se levanta hasta que entra en el cole.
- Mantener la calma. Esto está relacionado con la despedida. Aunque tengamos unas ganas locas de llorar, es importante que no lo hagamos delante de ellos. Si lloramos ellos se asustarán y llevarán peor la despedida.
- Valida las emociones. Es fundamental validar lo que siente el niño con frases como «entiendo que estés triste cuando nos despedimos, pero después vendré a por ti».
- Comunicación con la guardería. Hablar cada día un poco para que nos expliquen cómo va el proceso de adaptación, si llora o no mucho, etc. nos hará estar más tranquilos y afrontar mejor estas separaciones.
- Utiliza herramientas. Hay cuentos que nos ayudan a explicar a los niños la experiencia de ir al cole. Nosotros usamos uno. En Amazon puedes encontrar diferentes, nuestros favoritos son: «La vaca que fue al cole» y «La perrita Pipa va al colegio«.
Conclusiones
Empezar la guardería puede ser un rato para grandes y pequeños. Aunque los primeros días puedan ser difíciles y todo un desafío para todas las partes, con el apoyo adecuado y las estrategias correctas, el pequie podrá encontrar su lugar y empezar a disfrutar de sus nuevas experiencias.