Una ecografía 5D es una ecografía en la que se puede ver al bebé en tres dimensiones. Es muy diferente a las ecografías que podrán hacerte durante el embarazo porque, si tienes suerte, podrás ver la cara del bebe.
Nosotros hicimos esta ecografía cuando estábamos de 23 semanas aproximadamente y la verdad es que fue una experiencia muy chula. En esta entrada os comentaremos cómo conocimos este tipo de experiencias, qué nos gustó y que no nos gustó.
¿Cómo conocimos las ecografías 5D?
Nosotros antes del embarazo la verdad es que estábamos bastante perdidos en cuanto a ecografías, que tipos de ecografía había, etc. Supongo que como todos los padres, empezamos a conocer este mundo a raíz del embarazo.
En nuestro caso, recuerdo que una amiga me comentó que era la semana del bebé en el Corte Inglés y que estaban haciendo ecografías 5D gratis a todas las madres que se apuntaran en una lista. Me animé, me apunté y me hicieron 5 minutos de ecografía gratis. La verdad es que estuvimos más tiempo porque la chica era muy maja, pero la oferta era «5 minutos gratis». Os he dejado el enlace porque esta feria la hacen todos los años y en varias ciudades españolas.
Después de esa ecografía, nos dieron un vale de descuento por si queríamos ampliar la ecografía y vivir una experiencia en el centro. Por lo que, nos decidimos a agendarla porque realmente era espectacular.
Creo que como padres, todos tenemos muchísimas ganas de poder ver cómo es nuestro bebé, su cara, sus gestos, a quien se parece (aunque en realidad probablemente no se parezca a nadie) y a través de la ecografía 5D puedes hacerte una idea de todo esto.
¿Qué nos gustó de la ecografía?
En nuestro caso, la chica era muy amable. Tuvo mucho tacto y nos trató en todo momento con mucho cariño. La experiencia fue genial y consiguió crear un clima super agradable. Además, nos ofreció bastantes fotos de nuestro bebé y eso nos encantó. También nos hizo un bonito collage.
Nosotros fuimos a un centro de ECOX. Os dejamos el enlace porque nos gustó mucho, nos trataron genial, nos regalaron una canastilla y un montón de fotos del bebé. Asimismo, van poniendo en la web dónde hacen sesiones gratis (Prenatal, El Corte Inglés, etc.) Me gustaría resaltar que esto no es publi.
¿Qué no nos gustó de la ecografía?
Ahora bien, yo siempre soy sincera. Algo que no nos gustó fue el precio. Me parece un precio un poco alto si tenemos en cuenta que no tienen que usar demasiado material «desechable». Es decir, el ecógrafo lo tienen comprado, aunque supongo que tienen que amortizarlo. De tener que decir algo negativo nos quedaríamos con este aspecto.
Otro aspecto importante, es la posición del bebé. Esto no tiene nada que ver con las profesionales del centro, pero si tienes la placenta por delante costará mucho más verle la cara. En nuestro caso la chica lo intentó muchísimas veces y al final sí que pudimos tener una captura de su cara, pero fue bastante complicado.
¿Cuándo hacerla?
Yo recomendaría hacerla sobre la semana 30 porque es ahí cuando el bebé tiene la cara más formada. Nosotros la hicimos pronto y nos quedamos con las ganas de hacer otra. Sin embargo, por el precio no repetimos. Si solo tienes pensado hacerte una mi recomendación es que esperes hasta la 3o aproximadamente.
Conclusión
Es una experiencia muy bonita que podrá ayudarte a ver cómo será finalmente tu bebé. Aunque es caro, creemos que merece la pena. Eso sí, ten en cuenta cuándo a haces si solo quieres hacerte una.