La lactancia diferida, como ya hemos comentado en diferentes artículos, consiste en dar la leche materna a través de biberón, cuchara, vaso, dedo-jeringa, etc. En otras palabras, se trata de dar la leche del pecho a través de cualquier medio que no sea el pecho. Se dice que es «diferida» porque no se da directamente desde el pecho.
El procedimiento es el siguiente: la madre se extrae la leche del pecho (generalmente con un sacaleches) y se la da al bebé en ese u otro momento en un recipiente (biberón en la mayoría de los casos). Por eso se llama “diferida” porque es pospuesta en el tiempo al no darse en directo desde el pecho.
Hoy vamos a explorar los motivos principales por los que una madre puede decidir hacer lactancia diferida, son los siguientes:
Necesidades médicas
Este suele ser el principal motivo para que una madre decida hacer lactancia diferida. Cuando decimos necesidades médicas nos referimos tanto a problemas médicos del bebé como a problemas médicos de la madre.
Necesidades médicas de la madre
La madre puede tener alguna enfermedad o alguna condición que le impida dar el pecho de manera directa. Por ejemplo:
- Mastitis o abscesos mamarios. La mastitis es la inflamación del tejido mamario y los abscesos mamarios son localizaciones de pus dentro del tejido mamario. Es importante tener en cuenta que cuando se produce una mastitis hay que seguir amamantando porque dejar de amamantar de golpe puede ser contraproducente. Aun así, hay mujeres que cuando sufren repetidamente mastitis deciden hacer lactancia diferida porque, en cierto modo, controlan mejor la producción del pecho.
- Condiciones de los pezones: planos, invertidos o pequeños. Los pezones planos son los que, como bien indica su nombre, son planos y no salen hacia afuera. Los pezones invertidos son los que están medios para adentro. Aunque es posible hacer LME directamente desde el pecho cuando se tienen estas condiciones, muchas madres optan por utilizar la lactancia diferida como herramienta para lactar a sus hijos tanto a corto como a largo plazo. Muchas asesoras de lactancia defienden que la forma y el tamaño del pezón no deben ser un obstáculo para la lactancia materna exitosa.
- Grietas en los pezones. Las grietas se suelen producir porque el bebé no se agarra bien al pecho, por ejemplo, por problemas de frenillo. Esto hace que se produzcan unas grietas que son muy dolorosas. Por ello, muchas mamás optan por realizar lactancia diferida, ya que de esta manera no hay problemas de agarre y, por lo tanto, se reducen las probabilidades de tener grietas. Eso sí, es importante (como veremos más adelante) escoger el tamaño adecuado de embudo, de lo contrario, también podrían producirse grietas.
- Ingurgitación mamaria. Ocurre cuando los pechos se llenan mucho de leche y esto produce bultos, dolor e hinchazón. La extracción es una manera de aliviar esa congestión.
Si estás en alguna de las situaciones anteriores, te recomendamos que te pongas en contacto con una asesora o un asesor de lactancia. Estos profesionales podrán orientarte y enseñarte qué herramientas usar. Mi recomendación es que utilices la lactancia diferida cuando ya lo has probado todo y no ha funcionado, porque la lactancia diferida, como comentaremos, es dura y requiere de mucha paciencia y dedicación.
Los asesores de lactancia estudiarán tu caso y te darán recomendaciones. Por ejemplo, para los pezones planos o invertidos se suelen utilizar pezoneras al principio, para las grietas en los pezones te pueden dar recomendaciones para mejorar el agarre del bebé al pecho, etc.
Asimismo, la lactancia diferida por necesidades médicas de la madre también puede ocurrir cuando la madre tenga que estar hospitalizada por algún motivo y vaya a tener que estar lejos del bebé.
Necesidades médicas del bebé
Por otro lado, el bebé puede tener algún problema médico que le impida tomar el pecho directamente. Algunas de estas situaciones pueden ser:
- Cuando son prematuros y tienen que estar en la incubadora. En estos casos en los hospitales cuentan con “sacaleches o extractores de leche hospitalarios” con el objetivo de que las madres puedan usarlos para dejar la leche y que el personal sanitario pueda disponer de ella cuando sus bebés la necesiten.
- Bebés con problemas de succión. El reflejo de succión es uno de los reflejos que desarrollan los bebés para la supervivencia que puede incluso verse desde aproximadamente la semana 13 de gestación (Durán-Gutiérrez et a., 2013). Aun así, no todos los bebés nacen con este reflejo totalmente desarrollado. Algunos, incluso bebés a término, pueden succionar con poca fuerza o hacerlo de manera poco coordinada y esto puede derivar en una imposibilidad para alimentarse de forma correcta (Campos, 2009).
- Problemas en el parto. El tipo parto es otra de las cosas que pueden afectar a un establecimiento correcto de la lactancia. Cuanto menos intervenido sea, mayores probabilidades habrá de que la lactancia se establezca sin problemas. Además, diferentes estudios ponen de manifiesto que la oxitocina puede hacer que los bebés nazcan cansados y, por ende, tengan poco instinto de succión imposibilitando o retrasando la primera toma. La epidural, a su vez, puede hacer que aumenten las probabilidades de los partos quirúrgicos y estos hacen que la madre no se sienta cómoda para amamantar. Además, la epidural también puede hacer que el bebé no esté todo lo activo que podría estar y que no succione con la misma fuerza (Sepkoski et al., 1992).
- Anquiloglosia. La anquiloglosia también puede conocerse como: frenillo lingual corto. Según un estudio realizado por Corrêa et al. (2008) causa problemas de succión y deglución en el 13% de los casos. En cuanto a la prevalencia, ocurre más o menos en el 5% de los bebés recién nacidos y está asociado a problemas en la lactancia. Estos problemas ocurren entre el 25 y el 60% de las veces. No solo imposibilita la succión efectiva, sino que puede producir heridas u otros problemas en el pecho de la madre.
Cuando ocurre algo de lo anterior las madres tienen dos opciones. Por un lado, utilizar la lactancia diferida como herramienta hasta que se solucione alguno de los problemas anteriores. Por otro lado, instaurar la lactancia diferida permanentemente.
Es importante tener en cuenta que, en este apartado, hemos mencionado las necesidades médicas principales que nos pueden llevar a hacer lactancia diferida. Aun así, hay muchas otras afecciones que pueden imposibilitar la lactancia materna y para las que habría que buscar esta u otras soluciones como, por ejemplo: alergias alimentarias, infecciones en la boca, síndrome de Pierre Robin, problemas neuromusculares, etc.
Separación temporal
Ya sea porque la madre tiene que volver al trabajo, porque tiene que ausentarse un determinado periodo de tiempo, etc. la lactancia diferida es una forma de garantizar que el bebé va a poder seguir tomando leche materna.
En estos casos, las madres suelen optar, en muchas ocasiones, por dar leche directamente desde el pecho y de manera diferida. Es decir, cuando están con el bebé hacen LME y cuando están fuera de casa hacen lactancia diferida.
Eso sí, para poder llevar a cabo esta práctica es muy importante contar con un buen banco de leche.
Querer implicar a otros familiares
Hay algunas madres que se sienten cansadas al amamantar. Al fin y al cabo, dar el pecho puede ser duro y, sobre todo, por las noches. Por ello, algunas madres extraen leche durante el día para que sea el otro progenitor quien alimente al bebé durante las tomas nocturnas. Esto proporciona mejor descanso a la madre.
Pero no solo se realiza por las noches, hay mujeres que deciden hacer lactancia diferida en todas las tomas con el objetivo de que el bebé pueda ser alimentado por otros.
Voluntad propia
Hay mujeres que no quieren dar el pecho directamente y esto es totalmente respetable. La sociedad tiene tendencia a juzgar a aquellas mujeres que deciden no dar el pecho sin tener en cuenta que quizás esa es la mejor opción para la salud mental de la madre.
Dicho lo anterior, muchas mamás deciden hacer lactancia diferida por diferentes motivos: querer involucrar a otros, flexibilidad, necesidad de descanso, experiencias pasadas negativas, etc.
Sea cual sea el motivo que has elegido para hacer lactancia diferida, recuerda que no estás sola y que se puede mantener en el tiempo. Yo misma llevo muuchos meses haciendo lactancia diferida con éxito. Si tienes cualquier duda, puedes ponerte en conctacto con nosotros 🙂
Te dejamos algunos enlaces de otros artículos sobre lactancia diferida:
- Banco de leche
- Crisis de lactancia en lactancia diferida
- Sacaleches Medela Solo
- Mi experiencia con la lactancia diferida
Te dejamos también unos enlaces por si quieres conocer información sobre sacaleches de Medela, sacaleches de otras marcas, repuestos de Medela y otro complementos para la lactancia diferida.