La disquecia del lactante es un término médico que probablemente no sepas lo que sea. Sin embargo, si hablamos de la dificultad para hacer cacas de los bebés quizás te suene un poco más. Es algo que ocurre durante las primeras semanas del bebé y puede durar hasta pasados los 4 meses. También hay gente que lo denomina «falso extreñimiento».
Es desesperante porque en muchas ocasiones lo que ocurre es que el bebé empieza a intentar hacer caca y no puede. Empuja y empuja, pero no consigue expulsar las heces. Es algo que nos genera mucho estrés porque, al fin y al cabo, vemos sufrir a nuestros peques, pero tenemos que relajarnos porque es algo totalmente normal y parte del desarrollo.
Es importante tener en cuenta que en bebés alimentados con LME (Lactancia Materna Exclusiva) es muy difícil que se produzca estreñimiento porque la leche materna, de por sí, es laxante. En bebés alimentados con leche de fórmula se considera estreñimiento si no hacen al menos una caca cada dos días. En el caso de que ocurra esto, es importante que lo consultes con el pediatra.
¿Por qué ocurre la disquecia del lactante?
En los primeros días de vida, los bebés pasan de estar en el útero a estar fuera de él y esto conlleva una serie de cambios en los patrones de evacuación intestinal. La inmadurez del sistema digestivo, en la mayoría de los casos, es lo que produce esta problemática. El intestino se tiene que adaptar a hacer la digestión de la leche que toma y que antes no tomaba.
¿Cuáles son los síntomas del falso estreñimiento?
Los síntomas más frecuentes son:
- Dificultad para hacer cacas
- Esfuerzo para intentar hacer las evacuaciones
- Irritabilidad
Todo lo anterior hace que los padres nos preocupemos. Nosotros mismos lo vivimos como desesperante. El ver a nuestro peque sufrir y no poder hacer nada para ayudarlo, porque en realidad es una cuestión de maduración y nada podemos hacer nosotros por acelerar o mejorar el proceso.
En resumen, la disquecia del lactante es una condición común en los recién nacidos y, en la mayoría de los casos, se resuelve por sí sola a medida que el sistema digestivo madura. Tranquilos mamis y papis, que es totalmente normal y como todo, se pasa 😉